La administración de fincas en Francia puede variar, según diferentes factores, pero los fundamentos de este trabajo suelen ser los mismos, aunque las diferencias entre las comunidades de vecinos pueden ser enormes.
Así que, sea profesional o voluntario, un presidente siempre gestiona la finca a todos los niveles: se encarga de la gestión financiera con la contabilidad, de la gestión administrativa, cuidando los datos de los copropietarios y de los inquilinos y participando en las asambleas generales. También, de ello se asegura del buen mantenimiento del edificio y del seguimiento de los trabajos de este mismo.
La función de administrador de fincas es muy importante para que todo se desarrolle bien, con una buena armonía entre todos los actores. En pequeñas fincas, lo más frecuente es hacer un llamado a un presidente voluntario, ya que permite reducir los costes, y tener una mejor relación, con más proximidad. Estos últimos años en Francia, han aparecido muchas aplicaciones y programas de gestión de fincas como Fynkus destinados a ayudar al presidente en muchas tareas, así como la difusión de noticias y de contenidos, la gestión de los impagos o simplemente, para mejorar la comunicación.
Sin embargo, en comunidades con un mayor número de vecinos o propietarios, tener un presidente profesional al frente de la comunidad parece esencial. Y dicha figura profesional se encarga de gestionar los conflictos de intereses con imparcialidad, y de poseer todas las herramientas para llevar a cabo la administración de la finca. De hecho, en una comunidad de vecinos puede ser una fuente de diversas discrepancias, ya que cada persona tiene sus propias ideas y voluntades en cuanto al futuro de la finca, deseos que exponen durante las famosas juntas de vecinos.
Sin embargo, formar parte de una comunidad de vecinos también tiene sus ventajas. En Francia, los habitantes suelen prestarse servicios como cuidar a los niños del vecino o a sus animales cuando no se encuentra allí, así como mantener su jardín cuando está de vacaciones. También cada año en verano, se celebra la “fiesta de los vecinos”, un momento de alegría en el que todos los vecinos se reúnen alrededor de una comida, para conocerse más, charlar y disfrutar. Un acto que permite estrechar lazos y conocer mejor a las personas que viven en tu entorno.